El jefe de la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE), Piero Corvetto Salinas, sostuvo que no estuvieron preparados para afrontar la campaña de desinformación sobre un “supuesto fraude” en las elecciones generales del 2021 y eso les afectó, pero dejó una lección, por lo que han mejorado los niveles de control para detectar y hacer frente a las informaciones sin sustento que busquen desacreditar el proceso electoral.
Explicó que no esperaban el ataque sostenido de ciertos sectores de la política, influencers y ciudadanos que se negaban a reconocer el triunfo de Pedro Castillo sobre Keiko Fujimori, admitiendo que el efecto resultó demoledor y dañino para los organismos electorales. “Una noticia falsa corre seis veces más rápido que la verdad”, dijo en un seminario para periodistas de Arequipa.
Recordó que había varias versiones para sostener la tesis del fraude. Por ejemplo, que votaron los muertos y niños que no tenían mayoría de edad. Sobre esas acusaciones, Lía Calderón Romero, directora del Registro Electoral de Reniec, aclaró que en las elecciones del 2021 el padrón se cerró en octubre del 2020, tal como lo indica el cronograma. Durante ese periodo hasta la segunda vuelta no se puede depurar a los fallecidos, por eso muchos de ellos seguían apareciendo y se denunció “que habían votado”.
Pese a la aclaración, la versión de fraude se mantuvo y llegó a niveles que no esperaban en la ONPE. Una situación similar pasó con el caso de los DNI amarillos. Al respecto, a nivel nacional 78.967 adultos aún mantienen este documento. No tramitaron el verde que identifica a los adultos, generando confusión, lo que fue aprovechado por los sectores que hablaban de fraude para asegurar que los “niños habían votado”.
Corvetto Salinas recordó la postura del artista Pedro Suárez-Vértiz, quien se unió a la campaña #QueremosVerLosVotos, pese a que la ONPE informó que las balotas de votación eran destruidas tras el conteo y que los ciudadanos eran libres de revisar las actas electorales, porque son de escrutinio público y hay hasta cinco copias que validan esos resultados.
Equipo fact-checking
“Nos preparamos para cuidar la salud de las personas. Organizamos un proceso electoral para cuidar a la ciudadanía del virus. No estábamos preparados para una denuncia de fraude”, acotó Corvetto Salinas, quien explicó que ahora la ONPE implementó un equipo de fact-checking (revisión de noticias) para hacer frente a la desinformación, lo que aplicarán en estas elecciones regionales y municipales.
“La ciudadanía no tiene que saber todo con respecto a un proceso electoral. Pero deben estar seguros de que trabajamos lo mejor posible. Lo que podemos hacer para quitarnos el sambenito del fraude es informar. Lamentablemente, tras las elecciones, nuestro presupuesto se redujo y no podemos hacer publicidad en medios de comunicación, pero tenemos otros canales”, explicó Corvetto.
Añadió que las acusaciones del fraude dejaron varias lecciones y, además de la unidad de fact-checking, lograron una alianza con el Observatorio Interamericano para el Combate a la Desinformación Electoral. Todo esto ayudará a luchar contra las fake news y las publicaciones falsas y tendenciosas.
Fujimorismo se negó a aceptar su derrota
Los resultados de la segunda vuelta del proceso electoral del 2021 dieron como ganador a Pedro Castillo Terrones; sin embargo, Fuerza Popular de Keiko Fujimori se negó a aceptar el escrutinio y, con el apoyo de los sectores de derecha que expresaban temor por la presencia de un político de origen de izquierda en Palacio de Gobierno, impulsó una campaña de desinformación alegando un fraude electoral promovido por las autoridades electorales, principalmente la ONPE.
Cortesía (La Republica)
