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Radiografía de una crucifixión | Infografía

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La icónica muerte de Jesús guarda enigmas que la medicina forense ha tratado por años de resolver. En esta Semana Santa analizamos este tema

Crucifixión de Jesús - Semana Santa

La crucifixión ha planteado una serie de preguntas sobre los castigos y el tipo de lesiones que pudo sufrir Jesucristo en la cruz. Recordamos este caso en Semana Santa. (Reuters)

 Si un médico forense le hubiese practicado una autopsia a Jesús, ¿cómo habría descrito las causas de su muerte? Puede que nunca lo sabremos con exactitud, pero podemos acercarnos. Y es que la emblemática crucifixión ha sido tema de estudio de varias investigaciones. En el marco de un día como hoy, en el que se recuerda la muerte del salvador cristiano, analicemos algunos puntos claves.
Infografía crucifixión de Jesús

La icónica muerte de Jesús guarda enigmas que la medicina forense ha tratado de resolver por años. En esta Semana Santa repasamos este tema. (Infografía: Antonio Tarazona)

UN POCO DE HISTORIA  

La crucifixión fue practicada primero por los persas y los escitas. Luego se extendió a Siria, Egipto, Grecia y Roma, donde se volvió una práctica común. Pero un ciudadano romano no podía ser sometido a este tipo de castigo, iba en contra de su derecho civil. Era exclusivo para asesinos, ladrones, esclavos, rebeldes y cristianos. Su objetivo era dar una muerte larga y humillante.

Según Frederick Zugibe, autor de “The Crucifixion of Jesus”, usualmente 5 personas estaban a cargo de la crucifixión. El líder era un centurión romano conocido como ‘exactor mortis’, y a los otros 4 se les llamaba ‘quaternio’.

CAMINO TORTUOSO 

Antes de que Jesucristo llegara al Gólgota, donde fue crucificado, fue azotado por orden de Poncio Pilatos, prefecto romano.

“El resultado normal de los azotes eran costillas fracturadas, severos golpes y laceraciones pulmonares, con el sangrado de la cavidad torácica y el neumotórax”, explica en su libro Zugibe.

A esto se suma la pérdida de sangre por la corona de espinas y al trauma al que fueron sometidos sus hombros al haber cargado la cruz –de más de 100 kilos– hasta el Gólgota.

MUERTE POR CRUCIFIXIÓN

Hay que tener en cuenta que hubo distintos tipos de crucifixión, y la causa de muerte variaba.

Para Jeremy Ward, fisiólogo del King’s College London, el peso del cuerpo al tirar de los brazos hacía que la víctima respirara con dificultad. Además, el corazón y los pulmones dejaban de funcionar conforme la persona perdía sangre. Asfixia, pérdida de fluidos y falla multiorgánica habrían sido los usuales desencadenantes de muerte en estos casos, sugiere el experto, y agrega que las víctimas se habrían mantenido con vida un poco más de 24 horas.

Respecto a los clavos –explica Ward–, se insertaban unos de 15 cm en las muñecas, para que así los huesos soportaran el peso del cuerpo. La punta habría cortado el nervio mediano, lo que no solo causa una gran cantidad de dolor, sino que paraliza la mano.

Las evidencias demuestran que los pies eran clavados por separado. La punta ingresaba por los huesos del talón, o bien por los metatarsianos en el medio del pie, indica el portal Forbes.

(Cortesía de El Comercio)